Los Amigos de la Biblioteca de Galápagos prepararon un mercadillo de objetos usados para sacar fondos con los que sufragar la actuación de un Cuenta-Cuentos profesional en próximas fechas.
Lo cierto es que no acudieron demasiados compradores, pues caía una nieve muy fina que congelaba a cualquiera que se atreviera a salir de casa. Y por si eso fuera poco, los chavales del pueblo se enfrentaban en partido de fútbol con nuestros vecinos de Azuqueca, y, lógicamente, las familias estaban con ellos.
A pesar de todo, las ventas fueron aceptables y se ha sacado un dinerillo.
El buen hacer de Mónica, socia de Asábiga, queda patente en esta fotografía, pues se nos reveló como una experta en esto de las ventas directas, logrando el mayor número de objetos vendidos a lo largo de aquella mañana.
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